
Básicos para iniciarte en el BDSM
Nalgaditas, jalón de cabello, ricas mordiditas por todo tu cuerpo, son parte del BDSM, sin darte cuenta quizá ya lo has practicado antes, conoce un poco más y descubre lo excitante que puede ser esta práctica.
Hoy te traemos los básicos para iniciarte en el BDSM, conoce y seguro lo disfrutarás, recuerda que esta práctica debe ser consensuada con tu pareja llegando a acuerdos y marcando límites, ¿qué serás hoy, dominante o sumiso?
Antes que nada ¿qué es el BDSM?
Una expresión comportamental cuyas siglas significan las palabras "Bondage y Disciplina", "Dominación y Sumisión" y "Sadismo y Masoquismo".
Bondage: Se refiere a las prácticas eróticas que establecen roles de poder asimétricos, como: amo-esclavo, jefe-empleado, maestro-alumno, policía-detenido, etc. En la práctica se relaciona esta expresión con las ataduras y restricciones con fines eróticos.
Disciplina: Es un término que hace referencia a prácticas eróticas relacionadas con reglas, castigos, adiestramiento, protocolos de comportamiento, posturas según las circunstancias, etc.
Dominación: Se refiere a las prácticas eróticas en las que una persona adopta un rol dominante para actuar, de acuerdo con su voluntad y su deseo sobre otra u otras personas que adoptan un rol sumiso. La persona en el rol dominante manda y dispone. Se trata siempre de una dominación sujeta al consenso y los límites establecidos por la persona que acepta ser dominada.
Sumisión: En este caso una persona adopta un rol sumiso en el que queda bajo la voluntad de otra u otras personas que adoptan un rol dominante.
Sadismo: Es un término que en este contexto se utiliza para referirse a prácticas eróticas en las que una persona voluntariamente obtiene placer causando dolor, humillación o incomodidad a La persona que adopta el rol sádico, cuida la situación a fin de evitar cualquier daño. Se trata de una práctica erótica que no tiene ninguna similitud con el sadismo criminal.
Masoquismo: Es el término que se usa cuando alguna persona de manera voluntaria obtiene placer experimentando dolor, humillación o incomodidad, de parte de otra persona que acepta esa situación. Se trata siempre de prácticas voluntarias que no pueden ir más allá de los límites establecidos por la persona que recibe el dolor, la humillación o la incomodidad, y que se pueden frenar en cualquier momento.
Estas prácticas tienen una variedad que va mucho más allá del dolor, la pareja busca enfocarse a sensaciones de placer, empoderamiento y control.
Por lo que es una práctica que necesita de acuerdos consensuales entre los participantes.
Es muy importante que antes de iniciarte en el BDSM conozcas las distintas técnicas que puedes aplicar, materiales y juguetes ideales para disfrutar.
Descubre tus límites; acuerden tú y tu pareja los términos, límites y una palabra de seguridad para detenerse cuando lo deseen.
¡Abre tu mente! El BDSM será algo nuevo para ustedes, por lo que deben abrir un espacio para la imaginación y la exploración, recuerden que se trata de disfrutar y de pasarla bien.
Busca tu rol. De seguro ya tienes una idea acerca de que te gusta más, si dominar o que te dominen.
No pueden faltar los juguetes. Existe gran variedad de juguetes para practicar el BDSM, algunos básicos con los que puedes iniciarte en esta excitante práctica son los látigos, esposas suaves, tobilleras, mordazas y pinzas para pezones.
Lo más importante es la confianza y la comunicación que exista en su relación.